El cuidado personal masculino ha dado un giro radical en los últimos años. Lo que antes se consideraba exclusivo del mundo femenino, ahora se consolida como una tendencia en ascenso entre los hombres.
Este fenómeno, conocido como Mampering, combina las palabras man (hombre) y pampering (mimos), y refleja el interés creciente por el bienestar y la estética masculina.
Qué es el mampering y en qué consiste

Se conoce por mampering al interés real y efectivo de los hombres por su aspecto estético y las acciones que se producen en el estilo de vida de los hombres y que conducen a él. Para ello, se sirve de una serie de preceptos o cuidados que pasamos a analizar a continuación:
Exfoliación: El punto de partida
Uno de los productos estrella en el cuidado masculino son los exfoliantes corporales. Los hombres prefieren texturas granuladas que eliminan células muertas y dejan una sensación de limpieza profunda. Los exfoliantes no solo mejoran la apariencia de la piel, sino que también favorecen la circulación, convirtiéndolos en el primer paso ideal para quienes comienzan a explorar el autocuidado.
Geles relajantes: Un aliado para el estrés
La vida diaria, junto con la práctica de actividades físicas intensas como el crossfit, genera tensión muscular. Para combatirla, los geles con efectos frío-calor se han convertido en imprescindibles. Formulados con ingredientes como lavanda o romero, estos productos no solo alivian la tensión, sino que también promueven la relajación, haciendo de la ducha un momento de desconexión y bienestar.
Hidratación: La clave para una piel sana
El cuidado de la piel no estaría completo sin cremas hidratantes, especialmente diseñadas para combatir la aspereza en zonas como codos, manos y rodillas. Las formulaciones nutritivas con ingredientes como glicerina, manteca de cacao o extractos naturales son esenciales para mantener una piel suave y saludable.
Un cambio cultural positivo
El Mampering simboliza un cambio cultural que celebra el autocuidado masculino como parte integral del bienestar. Lejos de ser una moda pasajera, esta tendencia está transformando hábitos y derribando prejuicios.
A medida que el mercado se adapta, surge una mayor oferta de productos diseñados específicamente para los hombres, reafirmando que cuidar de uno mismo no solo es válido, sino necesario.
Con esta revolución en marcha, el autocuidado masculino promete quedarse como una práctica esencial en las rutinas diarias, marcando un antes y un después en la belleza masculina.