Si hay un videojuego que ha sabido mantenerse en boca de todos durante más de una década, ese es Star Citizen. Lo que comenzó en 2012 como un sueño de Chris Roberts y una campaña de crowdfunding de apenas 2,5 millones de dólares, se ha convertido en un monstruo de proporciones históricas. Hoy, el proyecto acumula 860 millones de recaudación y todavía no tiene una versión definitiva en el mercado.

Sí, lo has leído bien: más de 860 millones y seguimos esperando el ansiado “1.0”. Lo que sí parece un poco más cerca es Squadron 42, la campaña para un jugador, que según el propio Roberts podría llegar en 2026. Y no lo hace con promesas pequeñas: asegura que será un lanzamiento “casi tan importante” como el de Grand Theft Auto 6. Palabras mayores.
El juego más caro (y ambicioso) de la historia
Cuando se habla de Star Citizen, lo primero que se piensa es en su presupuesto colosal. No hay prácticamente otro proyecto comparable salvo el propio GTA 6, del que se estima un coste de entre 1.000 y 2.000 millones de dólares. Sin embargo, lo de Cloud Imperium Games es otra historia: un desarrollo vivo, en constante evolución, que se financia tanto con inversores privados como con la pasión de su comunidad.
La propuesta es tan ambiciosa como interminable: un simulador espacial masivo donde puedes explorar planetas, pilotar naves, participar en batallas, comerciar o simplemente perderte en la inmensidad del universo. El problema es que ese universo todavía no está acabado.
¿Juego sin final o futuro coloso?
El hype sigue intacto, pero también el escepticismo. Star Citizen es el proyecto eterno, con múltiples retrasos y una base de jugadores que mezcla fe ciega con impaciencia. Cada nueva demo, cada actualización y cada nave añadida mantiene el interés, pero la pregunta siempre es la misma: ¿cuándo veremos el juego completo?
Lo que sí está claro es que Squadron 42 puede ser el primer paso real para medir de verdad el alcance del proyecto. Si la campaña cumple con lo prometido en 2026, entonces quizás empecemos a creer que ese Star Citizen definitivo está más cerca de lo que parece.
De momento, toca esperar… y seguir soñando con el que puede ser el videojuego de entretenimiento más caro y ambicioso de la historia.