El LIV Golf 2025 se ha convertido en un auténtico campo de batalla… y Jon Rahm no piensa rendirse tan fácilmente. Con un Joaquín Niemann intratable al frente del campeonato —cinco victorias y 206,80 puntos que asustan—, todo parecía resuelto. Pero no. Queda pólvora en el saco del de Barrika.
Rahm llega a Chicago con 169,16 puntos y un objetivo claro: ganar o ganar para seguir con vida en la carrera por el título individual. Y lo ha dejado bien claro ante los medios: “Mientras haya una posibilidad, aunque sea mínima, voy a pelear cada golpe.” Una declaración de guerra que pone picante a una temporada que, hasta ahora, parecía cosa de uno solo.
Rahm confía en la remontada en el LIV de Chicago
La clave está en el sistema de puntuación de LIV Golf, que permite remontadas tan locas como épicas. Si Rahm gana esta semana en Chicago y Niemann tropieza, la lucha se iría viva hasta la última cita en Indianápolis.
Y eso es justo lo que quiere el español: dar espectáculo hasta el final.
“No estoy pensando en cálculos, solo en jugar mi mejor golf”, ha dicho Rahm. Y razón no le falta. Porque, como él mismo apunta, cuando Niemann no ha ganado, tampoco ha sumado demasiado. La consistencia de Jon le permite soñar.

Al otro lado, Niemann se mantiene tranquilo, pero no confiado. Sabe que tiene margen, pero también que tiene a uno de los mejores del mundo pisándole los talones. Y eso, a falta de dos torneos, pesa.
El ambiente golfístico en Chicago está cargado. Los focos apuntan a este cara a cara entre dos titanes del golf moderno. Y los fans, claro, frotándose las manos. Porque si algo nos ha enseñado el LIV Golf, es que todo puede pasar en un par de hoyos.
¿Podrá Rahm obrar el milagro? ¿O terminará Niemann sellando el campeonato por la vía rápida? Lo sabremos en unos cuantos swings. Pero algo está claro: esto no se acaba hasta que se hunde el último putt.