Cuando te llega una multa a casa, lo primero que piensas es: “¿Otra vez?” Pero cuidado, porque algunas sanciones en España no son precisamente calderilla. Si pensabas que 100 eurillos por pisar un poco el acelerador era lo peor que podías esperar… siéntate, que esto se pone serio.
Las infracciones de tráfico con las multas más caras en España

La Dirección General de Tráfico (DGT) ha sacado la artillería pesada con sanciones que pueden llegar hasta los 20.000 euros. Sí, lo has leído bien. Hay infracciones tan graves (o tan estúpidas, según se mire) que te pueden costar más que un coche de segunda mano.
Empecemos con las multas clásicas que a todos nos han puesto —o nos van a poner— en nuestra trayectoria como conductores:
- Exceso de velocidad, el pan de cada día. Hasta 600 € si pisas más de la cuenta.
- Alcohol o drogas al volante: entre 500 y 1.000 €, y seis puntazos que vuelan.
- Usar el móvil mientras conduces, otra joyita: 200 € y otros seis puntos al limbo.
Pero la cosa se pone aún más divertida cuando hablamos de infracciones “muy graves”. ¿Te ha dado por instalar un inhibidor de radar? Mal asunto: 6.000 € de multa y seis puntos menos. ¿Se te ocurre poner una señal falsa para desviar el tráfico? Eso te lo castigan como si hubieras abierto un peaje ilegal: hasta 20.000 € del ala.
Y ojo, porque si el lío es gordo, el tema pasa a manos de un juez. Ahí ya no valen excusas: si la jugada ha puesto en riesgo a más gente, puedes acabar pagando la multa máxima… y no hablamos de la de tu bolsillo, sino de la que te persigue en el BOE.
La moraleja está clara: si no quieres que tu cuenta bancaria se quede tiesa, tómate muy en serio la conducción… y esta noticia.