Kawasaki ha sorprendido al mundo con una propuesta que parece sacada de una novela de ciencia ficción: ‘Corleo’, un caballo robótico que promete transformar la manera en que concebimos la movilidad personal. Presentado en la Expo 2025 Osaka-Kansai, este proyecto, que no es ni un coche ni una moto, se perfila como una de las apuestas más ambiciosas del fabricante japonés para el futuro del transporte, con el objetivo de llegar al mercado en el año 2050.
A primera vista, Corleo recuerda a las criaturas mecánicas del videojuego Horizon Zero Dawn. Su aspecto imponente se combina con una sofisticada ingeniería: estructura de acero, patas articuladas, inteligencia artificial avanzada y funcionamiento a base de hidrógeno. Todo ello con una finalidad clara: ofrecer una movilidad alternativa, eficiente y completamente adaptada a terrenos difíciles.
Kawasaki Corleo, el lobo robótico de 150 cc propulsado por vapor de agua
Kawasaki describe esta máquina como un vehículo todoterreno de movilidad personal, con la estabilidad y el espíritu de conducción propios de sus míticas motocicletas, pero con un diseño cuadrúpedo que le permite sortear obstáculos, escalar pendientes y desplazarse incluso por superficies accidentadas. Sus patas terminan en pezuñas de caucho, pensadas para proporcionar agarre y adaptabilidad, sin sacrificar la experiencia de usuario.

Uno de los aspectos más innovadores de Corleo es su modo de conducción. No hay manillar, ni pedales, ni mandos visibles: el piloto guía al robot con su cuerpo, en una especie de conexión biomecánica que recuerda a montar un caballo real. Además, gracias a sus sensores y a la IA incorporada, el sistema analiza los movimientos del usuario para proporcionar una conducción intuitiva y fluida.
Con un motor de 150 cc y emisiones casi nulas (solo vapor de agua), este caballo robótico quiere posicionarse como una alternativa sostenible y respetuosa con el medioambiente. En palabras de la propia marca, el propósito de Corleo es mantener el placer de la conducción mientras se refuerza el vínculo entre humano y máquina.
Todavía faltan años para verlo cabalgar por nuestras calles o caminos, pero no cabe duda de que Kawasaki ha lanzado una propuesta que combina tecnología, movilidad y una visión audaz del futuro. ¿Estamos ante el transporte personal del mañana? Todo apunta a que sí.