¿Te imaginas quemar calorías sin moverte del sofá? Pues resulta que no es un truco de TikTok ni un invento de gurús del fitness, sino un descubrimiento científico de la Universidad de Houston. El protagonista de esta historia es el sóleo, un músculo pequeño que está en la pantorrilla y que, según los investigadores, puede mantener tu metabolismo activo durante horas… incluso mientras estás sentado.
Sí, has leído bien: no hablamos de correr 10 km ni de matarte a hacer pesas. Solo de un movimiento sencillo que los expertos han bautizado como “flexión del sóleo”. Básicamente, consiste en estar sentado, apoyar los pies en el suelo y levantar los talones dejando la punta fija. Vamos, como si intentaras imitar un minipedaleo, pero sin despegarte de la silla.
Movilizar el sóleo sentado te permite quemar calorías sin moverte
Los resultados del estudio son una locura: al activar el sóleo, el metabolismo oxidativo (ese que se encarga de quemar glucosa y grasa en sangre) se mantiene disparado durante horas. De hecho, los investigadores comprobaron que tras probar el ejercicio, los niveles de azúcar en sangre mejoraban un 52% y la necesidad de insulina se reducía hasta un 60% después de una bebida azucarada. Todo esto con gente… sentada.
Lo más sorprendente es que este músculo, que apenas representa un 1% del peso corporal, parece tener una capacidad de quemar energía que supera con creces la de cualquier otro método popular como el ayuno intermitente o las típicas rutinas de gimnasio. “Nunca soñamos que tuviera esta capacidad”, admiten los científicos.
Ojo, porque no estamos hablando de la típica dieta milagro ni del reto viral de moda. Se trata de un movimiento fisiológico que podría cambiar la forma en que entendemos la inactividad diaria. Pasar horas sentado delante del ordenador ya no tendría que ser sinónimo de acumulación de grasa o riesgo de diabetes tipo 2.
El sóleo estaba ahí, escondido en tu pantorrilla, esperando a ser descubierto como el “motor secreto” que quema grasa incluso sin moverte. Así que ya sabes: la próxima vez que te sientes frente al portátil, prueba a darle caña al talón… tu metabolismo te lo va a agradecer.