¿Pensabas que lo habías visto todo en el arte de romper corazones? Pues agárrate, que llega el banksying. Sí, como lo lees. Tiene nombre de artista callejero y es, probablemente, la forma más sigilosa —y despiadada— de decir adiós sin decir nada. Y no, no lo inventó TikTok, aunque ya lo ha viralizado como si fuera una receta de galletas saludables.
¿Qué es exactamente el banksying?
El banksying, según los expertos en relaciones y dramas sentimentales, es el arte de planear tu ruptura como si fuera una obra de teatro, sin que la otra persona sospeche nada. Silencio por aquí, menos planes por allá, un poco de frialdad sutil… y ¡zas!, el adiós llega como una guillotina emocional. Todo esto, mientras el o la afectada sigue creyendo que “sólo estás un poco estresado”.
¿El nombre? Viene de una acción legendaria del artista Banksy, que dejó que una de sus obras se autodestruyera justo después de ser subastada por una millonada. Lo tenía todo planeado, pero nadie lo sabía. Lo mismo con estas rupturas: la bomba está preparada desde hace meses, pero solo explota cuando a una de las partes le viene bien.

Según las cifras, una de cada cuatro personas ha practicado banksying sin saberlo. Y eso es mucho más común de lo que parece. Puede durar entre tres meses y un año, tiempo en el que quien va a romper finge normalidad mientras se prepara su escapatoria emocional. Todo muy zen, pero también muy egoísta.
¿El problema? Quien lo sufre no ve venir nada, lo que hace que el impacto emocional sea brutal. La psicóloga Lara Ferreiro lo resume sin paños calientes: “Es la muerte lenta y silenciosa de la pareja. Es supercruel, pero muy rentable a nivel individual”.
Así que ya sabes: si tu pareja ha dejado de hacer planes, está más fría que el hielo seco y siempre tiene una excusa para no hablar de “nosotros”, puede que estés viviendo un banksying en toda regla. Y si eres tú quien está orquestando la fuga… bueno, al menos ahora sabes cómo se llama tu jugada maestra.