El misterio que rodea los bajonazos de rendimiento de Fernando Alonso los sábados sigue creciendo. A falta de solo tres carreras para cerrar temporada y ciclo reglamentario, Aston Martin cree haber encontrado una explicación mucho más inquietante que un simple problema de altura del coche.
Según el equipo, sus rivales podrían llevar todo el año usando un truco ilegal para esquivar los controles de la FIA… y eso explicaría por qué el Aston vuela los viernes y desaparece los sábados.
El propio Alonso ya lo dejó caer en Brasil con una frase que sonó a secreto inconfesable: “No puedo ser sincero”. Y ahora sabemos por qué. El problema no es solo levantar el coche: Aston Martin cree que hay ‘algo más’ La historia ya es de sobra conocida:
• Viernes: el Aston Martin va rápido, estable y competitivo.
• Sábado: el coche se desinfla en clasificación sin motivo aparente.
Todo apunta al desgaste de la tabla del fondo, pieza clave que la FIA mide para verificar la legalidad del monoplaza. Si está demasiado desgastada, el coche queda automáticamente fuera. Pero Aston Martin sospecha que ellos cumplen estrictamente la norma… y otros no.
Teoría 1: jugar con la aleatoriedad de la FIA
La FIA solo revisa a los cinco primeros clasificados y a dos coches más al azar. Para equipos de zona media, como los que luchan con Aston Martin, entrar en ese top 5 es casi imposible.
Conclusión: Puedes rodar demasiado bajo, desgastar más la tabla, ganar rendimiento… y tener poquísimas posibilidades de que te inspeccionen. Es un truco viejo, pero muy efectivo en una parrilla tan apretada.
Teoría 2 (la más seria): materiales ilegales que se dilatan con el calor
Esta es la teoría que realmente inquieta al equipo de Alonso. Aston cree que algunos equipos están usando un tipo de material en el fondo que se expande con la temperatura, hasta sobresalir por debajo de la tabla reglamentaria.
¿La consecuencia? Lo que golpea el asfalto no es la tabla… sino esta capa inferior “camuflada” que desgasta otra parte del coche que la FIA no mide.
Si esto es cierto, sería un método clarísimo de burlar los controles técnicos, algo totalmente prohibido en el reglamento. Aston Martin sospecha que este truco podría dar ese extra de agarre y velocidad en clasificación que a ellos les falta.
El problema: No tienen forma de demostrarlo. Y ya no hay tiempo para desarrollarlo en su propio coche.
Tres carreras, un misterio y una batalla interna sin resolver
Con el título en juego, un calendario comprimido y los equipos guardando secretos como si fueran lingotes de oro, este enigma parece destinado a quedar sin resolver en 2025.
Aston Martin seguirá investigando, pero todo apunta a que este será uno de los grandes temas polémicos de la F1 moderna.
Si sus sospechas son ciertas, no solo explicaría las montañas rusas de rendimiento de Alonso. Explicaría por qué, a veces, en la Fórmula 1 actual, la diferencia entre volar y hundirse puede estar escondida justo debajo del coche.
