La salud sexual no depende solo de lo que pasa en la cama. También se juega en la mesa. Sí, lo que comes (y cómo lo comes) puede ser la diferencia entre un “gran partido” o un gatillazo épico.
En las últimas horas, ha sido noticia un estudio que confirma que la alimentación influye en tu energía, en tu circulación y en tus hormonas, tres pilares básicos para rendir bajo las sábanas.
6 hábitos alimenticios que arruinan tu vida sexual y cómo ponerles freno

Si quieres mejorar tu vigor y rendimiento en la cama, toma buena nota de los siguientes consejos médicos:
Comida basura
Hamburguesas, fritanga y refrescos no solo inflan la barriga, también bloquean tus arterias. Y si la sangre no fluye como debe… el pene tampoco responde. La solución es obvia pero necesaria: más fruta, verdura y ejercicio.
Menos descafeinados
Tu café de la mañana es más importante de lo que crees. La cafeína mejora la circulación, y eso se traduce en erecciones más firmes. El descafeinado, en cambio, no te da ese empujón. Así que piensa dos veces antes de renunciar a la cafeína.
Más alcohol de lo que tu cuerpo puede admitir
Un par de copas te desinhiben, pero varias rondas pueden dejarte fuera de juego. El famoso “gatillazo por whisky” tiene base científica: el alcohol deprime el sistema nervioso y baja la testosterona. Si quieres una vida sexual activa, modera el brindis.
Azúcar a todas horas
Los dulces no solo te suben de peso: también reducen tu testosterona y te dejan sin ganas de nada. Además, el bajón posterior te puede mandar directo al sofá. Mejor opta por los azúcares naturales de la fruta.
Raciones enormes
Atiborrarte hasta no poder más te deja sin energía para cualquier cosa, y menos para el sexo. Divide tus comidas en porciones más pequeñas y equilibradas si sabes que la noche puede terminar en acción.
Falta de vitamina D
Un déficit de esta vitamina afecta al óxido nítrico, clave para que los vasos sanguíneos funcionen. Traducido: menos vitamina D, menos erección. Busca el sol, come pescado azul y, si hace falta, habla con tu médico sobre suplementos.
Como ves, lo que pones en tu plato marca lo que pasa en tu cama. Ajustar tu dieta puede ser el mejor afrodisíaco que existe.